Homenaje a Kiko y a su locura jocosa que nos legó tantas tardes de risa a lo loco inspirado por Salvador Pániker.
En el fondo, y quizá también en la superficie, me gusta Salvador Pániker. Creo ser yo él o simplemente tener la misma bioquímica. Y creo que esto no es tan fácil. Puede que todos la tengamos, pero solo nos damos cuenta de ello cuando sabemos escuchar y sabemos dejarnos fluir, seguro que anbas cosas. Más que nada, olvidarnos del propio yo y abstraernos a lo que nos rodea y nos habla de alguna manera. Todos hablamos cuando callamos y nos movemos cuando estamos quietos, olemos cuando nos aseamos y nos rozamos con las miradas , aunque a veces huyamos. Quiero más a todos quienes yo quería y los respeto más. Me duele que me odien o que me malinterpreten. La duda cuanto más grande, más ilumina, se dice en el zen, quién no duda no vive ni crece. Creo en eso, aunque deba educarme para aceptarme, entenderme...
Leopoldo Modeano dixit
"Al ser humano se le ha hecho lo imposible para que elija.Para que tome partido, para que acepte a priori, para que rechace a priori,para que deje de mirar,para que deje de existir, delante de una cosa que simplemente habría podido amar" Manchas en el silencio, Samuel Becket
SIEMPRE
sábado, 9 de mayo de 2009
Volverse loco a lo Martín Romaña. Parte I
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